domingo, noviembre 12, 2006

Cambiar si quiere la paz en Irak y Medio Oriente

Como habíamos advertido los republicanos perdieron las elecciones legislativa en los EEUU producto de los errores cometidos por su gobierno en política internacional, particularmente por el mal manejo de la situación en Irak. Ahora el Sr. Bush con la opinión publica en contra, intenta recomponerse ante la situación creada. Rápidamente determino la salida de su Secretario de Defensa, Sr. D Ransfield, y en su lugar coloco a otro colaborador, el Sr. Robert Gate, para intentar revertir el curso de los acontecimientos en Irak.

Parafraseando a Albert E, le decimos al presidente norteamericano que “querer resultados distintos haciendo las mismas cosas es ser necio”. Debe cambiar radicalmente su política para Medio Oriente, de lo contrario prolongará por mas tiempo el caos y la guerra en esta parte del mundo. Pienso que iniciar esta etapa vetando la sanción de la ONU a Israel por la matanza en Beit Hanun de 18 civiles, la mayoría mujeres y niños, no es ningún gesto de amistad para con los países árabes y no predice cambio en su política exterior, a pesar de su manifiesto deseo.

Cambiar es hacer las cosas distintas y esto debe implicar buscar relaciones amplias y verdaderas con los distintos sectores sociales de Irak, como los sunitas, con el partido Baaz de Saddam Husein, los cuales no se sienten representados en el gobierno actual y es la única organización capaz de garantizar orden en este país lleno de integristas islámicos que no responderán jamás a ningún interés occidental por bueno que este sea, porque su única organización es el fanatismo religioso.

Cambiar es hacer que Israel sea mas tolerante y se aboque a negociar la paz con sus vecinos, aunque creo en su derecho a defenderse. Es quitar el embargo a la ayuda del Gobierno Palestino, es buscar la forma de erradicar la pobreza de este pueblo para que se sienta orgulloso de pertenecer a la comunidad internacional y no busque en los extremistas la ayuda que necesita.

Hace falta revisar la política confrontacional y beligerante que se ha seguido EEUU en esta zona del mundo. Ello también debe pasar por buscar advenimientos con los lideres del antiguo régimen de Saddam Husein y con él mismo, así como con los vecinos de Irak, Iran y Siria, aunque esto signifique reconocer que se han equivocado y que la invasión no era necesaria.

Ser inteligente es saber dar marcha atrás y retomar con donaire el camino correcto. El Sr. Bush conoce muy bien esto. Demostró su audacia en la reunión rápida que convoco con los lideres demócratas triunfantes del congreso de sus país. Así también debe hacerlo en el Medio Oriente, si en verdad quiere paz.