El resultado electoral, lo que debemos hacer despues.

La falta de información, o la información tardía de los resultados electorales en la república dominicana debe terminar con este mismo torneo, las cosas deben hacerse de otra manera, eso es algo que crea incertidumbre innecesaria, que da hasta vergüenza. Por ello los medios de comunicación, los jueces de la JCE, los partidos políticos y todo quien quiera debe prestarle atención a las sugerencias y críticas que a continuación haré:

¿Cómo es posible que el primer boletín correspondiente a las elecciones presidenciales se conozca a las 10:30 PM?, cuatro horas y media después de cerrados los colegios, a pesar de la palabra empeñada de los jueces de la JCE y de los medios tecnológicos que existen.

Los resultados de las actas en la medida en que se van escaneando deben conocerse en vivo, en la medida en que van ocurriendo, la población debe saber lo que está pasando ahí adentro en la JCE. ¿Por qué no se puede saber? Para ello hay que eliminar el procedimiento de verificación de las actas antes del escaneo, eso retarda el proceso. Antes de la proclamación de algún candidato hay tiempo de verificar todas las actas que se quieran.

Se sabe que las primeras actas que llegan son de los Colegios más próximos, ¿Qué de malo tiene que se conozcan primero?, la JCE lo que tiene que hacer es dar la advertencia de la situación y punto. De todas formas esta situación se verificaría en la primera media hora quizás. En la medida en que llegan las actas de los colegios más lejanos o con impugnaciones, el resultado se equilibra, al final de cuenta el resultado es el mismo. El orden de colocación de los factores no altera el producto.

El escrutinio lo que no debe hacer es interrumpirse nunca y esto la ley lo prevee.

Por otro lado, se debe permitir la difusión del resultado de los sondeos o de los conteos a boca de urna que las firmas encuestadoras puedan hacer. La acción de Clave Digital al dar a conocer los resultados del sondeo a boca de urna, antes que condenarse debe premiarse. ¿Qué de malo tiene eso?

En este país todos los periodistas y medios de comunicación conocían los resultados adelantados en los conteos rápidos, pero nadie puede (o no podía) darlo a conocer hasta tanto la JCE no lo diga en sus boletines. Es lo que se puede llamar un ejercicio legal de hipocresía colectiva al servicio de ninguna causa.

Para evitar la guerra de sondeo a boca de urna y de encuestas también (porque estamos en dominicana) la JCE lo que tiene que hacer es precalificar las firmas que tienen derecho a hacer los sondeos en base a la certeza de sus resultados anteriores. Solo las que acierten tienen derecho, las demás no y problema resuelto. Nadie dará resultados amañados.

La propia ley electoral reconoce que los resultados de un colegio electoral son públicos, incluso manda que los mismos sean publicados a la salida, en la puerta de todo Colegio Electoral, cuando dice en su artículo 136 que: “Después de leerse en alta voz (el acta con los datos), se fijará un ejemplar de cada relación en el exterior del local en que se haya celebrado la elección, junto a la puerta del mismo”.

Si los resultados de las actas la ley dicen que debe hacerse público, ¿Por qué una firma encuestadora no puede hacer un conteo rápido de esas actas publicas y hacer una proyección con el resultado? Obviamente ese nunca va a ser un resultado oficial, pero todo el mundo lo sabe.

Son los partidos los que quieren que la población se informe. El PRD, dos semanas antes, se opuso, sin dar ninguna razón, a que las actas se escanearan para evitar el retardo por la digitación en la emisión de los boletines. La JCE tuvo que imponerse.

Un canal de noticias, específicamente el Canal 13, mostro en la TV un monitor, dentro del recinto de la junta, de dominio público, donde se pasaban las actas al momento de ser escaneadas. Esto fue motivo de una protesta formal del PRD, aduciendo que se violo la constitución y la ley electoral, con retiro de delegados y todo. Es más, Fafa Taveras hablo incluso de “desestabilización política del país” por este hecho, en una llamada al canal 33. Este señor piensa que estamos en el año 1965 todavía. El presidente de la JCE tuvo que decir que esas actas “tenían vocación publicable”. Cuantos locos!, diría el Chavo

Hasta ahora las informaciones sobre las actas y los resultados electorales, cuando se está en el escrutinio de los votos, ha sido el privilegio de los partidos políticos y de los jueces de las juntas de turno y eso hay que terminarlo. La ley debe adecuarse a esta nueva realidad.

El tiempo que transcurre entre el cierre de los Colegios hasta las 10:00 PM, yo lo he denominado las horas de la penumbra, nadie sabe en este país lo que pasa en la JCE, el país está ciego en este tiempo. Son muchos los “acuerdos de aposentos”, “fallos históricos”, “ceros y palitos agregados” y “truinfos” (así entre comillas) que se han validado en este país sobre la base del privilegio de la información de los partidos políticos y los jueces de la JCE en ese periodo. Esto hay que terminarlo ya.

Por esto no comprendo la posición del PRD en torno a los escanneres y la divulgación rápida de los resultados.

Los medios de comunicación (los que quieran aplicar, nacionales o extranjeros, no escogido por los jueces ni propuestos por los partidos) deben ser parte del proceso de escrutinio, en el entendido de que nadie tiene mala fe. Los resultados deben conocerse en vivo y son los medios de comunicación quienes logran esta parte, la informando a la gente.

Después que se difunde una información a la población no es posible volver hacia atrás por muchos acuerdos de aposentos que se puedan hacer.

La ley electoral debe adecuarse en aras de la transparencia y la rapidez en la elaboración de los boletines. Todo cuanto ayude en este propósito debe ser incluido en la ley.

Así se logra la transparencia, con información útil a tiempo para la ciudadanía, no retrasándola. Es tiempo de terminar con el privilegio de la información de los pocos en beneficio de las mayorías. A todos nos beneficia.

Es lo que debemos hacer después del resultado electoral.