La dictadura del hambre: el problema del mundo

La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura Alimentación, FAO, ofrece las siguientes cifras en su Informe sobre la inseguridad alimentaría del 2004:

1. Un niño muere cada cinco segundo en el mundo por mal nutrición y hambre (6.3 millones de niños al año)
2. Un niño mal nutrido pierde entre el 10% al 15% de sus ingresos durante toda su vida.
3. 852 millones de personas en el mundo padecen de hambre crónica y mal nutrición, el 96% de ellas vive en los países en desarrollo, solo 1% en los países desarrollados.
4. El mundo pierde 500 mil millones de dólares al año por minusvalía y deficiencia de productividad como consecuencia del hambre.
5. Si invertimos 24 mil millones de dólares de aquí al 2015, reduciremos el hambre a la mitad en el mundo y esto representaría a su vez en términos de aumento del PIB unos 120 mil millones de dólares adicionales para los países en vía de desarrollo, solo por tener una población más saludable.
6. Por cada dólar que se invierte en reducir el hambre en el mundo se generan ingresos por 15 o 20 dólares.

Al terminar de leer estas cifras de la FAO, usted amigo lector no tiene que ser un científico de la NASA, ni ningún cientista social distinguido para saber que el problema del mundo tiene un nombre: EL HAMBRE

¿Que es combatir el hambre?, la misma FAO dice como hacerlo, solo hay que garantizar la seguridad alimentaría en el mundo. Es tan fácil como aumentar la producción de los distintos rubros agrícola y crear la infraestructura que ayude a conseguir este objetivo. Invirtiendo unos 30,000 millones de dólares hasta el 2015 la reduciríamos a la mitad.

Aunque parezca sin solución, resolver el problema del hambre en el mundo puede ser una buena oportunidad para salir del subdesarrollo, incluso podría ser un buen negocio como lo atestiguan los datos de la FAO, pero hay que acometer estas tareas con seriedad, sin demagogia, con planificación y objetivos claros, pero lamentablemente no son estas las prendas que mejor adornan a nuestros gobernantes, por eso somos países pobres.

Para que usted entienda que esto no es mucho dinero le diré que la guerra de Irak le cuesta al contribuyente norteamericano unos 75,000 millones de dólares por año. Pero no miremos a los norteamericanos solamente (porque siempre hacemos lo mismo) y mire a su alrededor, ¿Cuanto se lleva la corrupción gubernamental de su país en el año?, le voy a dar un dato, según el Banco Mundial los sobornos le cuestan al mundo unos 6 mil millones de dólares por cada país.

De modo que si los gobiernos se deciden a resolver el problema el hambre en el mundo, solo dejando de ser corruptos, entonces las cifras serian al revés, lo que hoy se pierde lo estaríamos ganando, o sea que los países en vía de desarrollo se ahorrarían, por ese solo hecho, unos 500,000 millones de dólares al año y evitaríamos la muerte de unos 6.3 millones de niños. Pero hagamos un poco mas de “masoquismo mental” y piense lo que representaría en el desarrollo de estos países la inversión de un suma igual de dinero.

Lo que ocurre es que nuestros políticos, primero llegan sin verdaderos planes de gobierno, no saben lo que van hacer y luego esta el problema de que ellos viven de la demagogia y esta encuentra su campo mas fértil en la miseria, el hambre y la ignorancia de las gentes. Si no existiera la miseria y el hambre tampoco ellos tendrían como mantenerse y hacerse ricos. ("Ni contigo ni sin ti tienen mis penas remedios, contigo porque me matan y sin ti porque me muero")

Es que estamos inmersos en el circulo vicioso del hambre: “No podemos ser productivos porque tenemos hambre y padecemos hambre porque no somos productivos”.

Esto es lo que se llama una verdadera inequidad social descarada, ¿o iniquidad?

Es la dictadura del hambre!