La censura ha cesado para estas actividades y útiles, es un paso relevante de la administración de Raúl, faltan mucho más cambios como son: libre tránsito, libertad de expresión y difusión del pensamiento, libre acceso a Internet sin censura, libre asociación, pluralismo partidario y democrático, libertad de elegir y ser elegido y sobre todo la propiedad privada, etc., pero bueno así se comienza, ayer teníamos menos libertades.
El único impedimento ahora para acceder a estos servicios y útiles lo crea la disponibilidad de dinero de los ciudadanos, con 17 dólares al mes de salario en promedio, es imposible disfrutar y comprar nada, veamos:
Una habitación de hotel cuesta de 80 dólares, para pasar una noche en un hotel, sin bebida ni comida, le cuesta a un ciudadano casi 5 meses de salario. Para pasarse un fin de semana en un hotel habría que trabajar un año completito.
El teléfono celular le cuesta 9 meses de salarios, sin incluir el costo de servicio de llamada.
Sin la presencia de un mercado abierto, con libre competencia la especulación se va a encargar de hacer mas inalcanzables estos servicios a los ciudadanos, el mercado interno no crecerá, tampoco la economía cubana lo hará en estos sectores. La ley, por estricta que sea no pude más que el mercado.
De modo que ahora tendremos “libertad para comprar”, pero “imposibilidad de adquisición”, o sea lo mismo, continua el privilegio de la clase gobernante, pero Raúl será más popular.
Esto nos indica que lamentablemente la fiebre no está en la sabana.
Obviamente la sensación de libertad se apodera de los ciudadanos y esto de por si los hace más felices porque “pueden hacer lo que quieran”, aunque sea una ficción.
El diccionario define la felicidad como: “Estado de ánimo que se complace en la posesión de un bien”. Decía B Russell, “ La falta de las cosas que el hombre desea es un elemento indispensable de la felicidad”.Ahora bien, la libertad genera demanda de mas libertad y esto es mejor.
Esa es la magia de la libertad, a veces incluso resulta contradictoria, pero es una felicidad.
Otro post sobre el tema: Raul Castro, entre la realidad y los viejos principios
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario. Es de gran ayuda siempre. Por favor seas respetuoso.