Les voy a dejar con un reporte de AFP que describe muy bien la política europea sobre los pobres inmigrantes negros africanos:
En la periferia de la ciudad de Tamanraset, enclavada en el Desierto del Sahara, hay miles de inmigrantes que viven entre las piedras y los escombros, y que se debaten entre dos opciones desafiantes: ¿Deben admitir la derrota y sufrir la vergüenza de regresar a su lugar de origen con las manos vacías o deben buscar trabajo --tarea casi imposible aquí-- para financiar otro intento de llegar a Europa?
El que tantos emigrantes se encuentren en este limbo no es casualidad. Los gobiernos europeos, que deben someterse al juicio de los votantes hostiles a la inmigración ilegal, han instado a que los países del norte de Africa actúen como el primer frente de batalla contra los indocumentados.
Esos países son alentados a detener a los emigrantes antes de que estén siquiera cerca del territorio europeo.
En Tamanraset, la policía argelina ha respondido a esas peticiones. Los emigrantes son enjaulados y subidos en camiones, que los dejan en un campamento en Tin Zaouatin, en la frontera de la vecina Mali. Los trabajadores asistenciales aquí señalan que esos traslados se realizan aproximadamente una vez al mes. En ocasiones, cientos de personas son deportadas.
"Los países del Magreb se están convirtiendo en una especie de zona de seguridad para que la UE detenga estos movimientos hacia Europa", dijo Peter Van den Vaart, quien se retiró el mes pasado como representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Argelia.
La Unión Europea está trabajando para cerrar sus fronteras, "con un énfasis en el aspecto represivo", añadió.
Un portavoz de la policía argelina no respondió a las solicitudes de una entrevista.
Pero algunos, maltratados por la policía y aquejados por el hambre y las enfermedades, señalan que su mejor opción es dar marcha atrás."Llevo aquí un par de años y no he conseguido nada", se lamentó Eugene Combapuie, un liberiano de 29 años, quien huyó de la guerra civil en su país en el 2002 y pasó tribulaciones en Costa de Marfil y Libia, antes de llegar a Argelia.
"En el tiempo que he perdido aquí en Argelia, hubiera podido lograr algo en otro lugar", reconoció, cerca de un refugio improvisado en la periferia de Tamanraset.
"Cuando vuelva a Liberia, todo será mejor, con la voluntad de Dios", señaló.Feisal Abdelaziz, quien trabaja en Tamanraset con la Comisión Internacional para el Desarrollo de los Pueblos, una organización no gubernamental italiana, trata de prevenir a los emigrantes sobre los riesgos del viaje.
"Me responden: 'Sí, todo eso es verdad, pero dame un empleo en mi país"', relató.
Las deportaciones o repatriaciones colectivas son también comunes en Marruecos y Libia, los otros dos países de la región más afectados por la inmigración. Varios grupos de derechos humanos han protestado por las medidas.
Alí Bensaad, catedrático de la Universidad de Provenza, Francia, dijo que la prioridad de la política europea hacia los emigrantes africanos se limita "a mantenerlos lo más lejos posible de Europa".
Bensaad añadió que los gobiernos del norte de Africa cooperan. Citó una ley promulgada recientemente en Túnez, para encarcelar a quienes ofrezcan ayuda a los emigrantes, así como la creación de un escuadrón policial argelino para combatir la inmigración ilegal.
Ello deja a los emigrantes en la marginalidad de lugares como Tamanraset.
¿Que le parece el reporte? Es una triste realidad.
Ahora bien, mientras los países ricos asumen esta conducta con sus vecinos hambrientos africanos, vecinos a los que ellos (los europeos) en muchos casos hicieron mas pobre por la sobre explotación a que los sometieron cuando eran colonias (nos sometieron a todos). Entonces nos piden a nosotros, los dominicanos, que nos resignemos a recibir a nuestros lamentablemente pobres vecinos haitianos, cuando el país no tiene recursos para atender ni si quiera a sus gentes.
noticias destacadas
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario. Es de gran ayuda siempre. Por favor seas respetuoso.